Señor todo poderoso de tu eternidad
idea miserable de suicidas y orates que deambulan sonámbulos,
largos,
y estérilmente ocupados
Y de los arrodillados bebedores de hiel escarlata
que arden en noches de lluvias emplumadas de arrepentimientos salomónicos, lamiendo su sexo
y pisoteando el amor inmarchitable de Dios
Agonizan en tertulias de letras empañadas.
Besando tejidos de sal los vientres mohosos de vírgenes bizantinas
Donde tus eucaristías gloriosas de miel gotean a trechos un líquido pesado
y viscoso que se confunden con los dibujos de la alfombra eclesiástica
donde beatas y reyes resucitan ente la cruz
Por eso bendito señor,
vierte tus lágrimas en los pellejos de animales aun
tibios y latentes que en tu presencia visto
1 comentarios:
una oración ácida, que a mi gusto es muy muy buena!!
besitos de luz
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